viernes, 9 de diciembre de 2011

El Cabrero: "Hay que tener cuidado por donde se pisa porque hay más mierda que piedra"


Entrevista a El Cabrero. Septiembre de 2007
“No me callo y cumplo las órdenes porque tarde o temprano las tendría que cumplir y hay algunas para desobedecerlas”

Antonio Alcántara / Madrid

Éste es el lema de José Domínguez “El Cabrero”. José recibe a Magazine Siglo XXI tras su maravillosa actuación en los Jardines de Sabatini dentro de la programación de los “Veranos de la Villa”. Revolucionario y crítico con las injusticias sociales, el cantaor de Aználcollar es uno de los referentes más importantes en el mundo del flamenco por su gran voz y sus letras comprometidas. Pero no sólo en la sierra sevillana se ha escuchado el eco de “El Cabrero”, su cante ha llegado a todos los rincones del mundo en sus giras con Peter Gabriel o Lenny Kravitz. La conversación es amena y gira en torno al flamenco, aunque pronto se manifiesta el compromiso social del artista sevillano y el coloquio deriva hacia temas filosóficos y políticos. La mirada de “El Cabrero” es cristalina, transparente como las aguas a las que canta y donde se mira cada mañana en sus paseos por el campo. Tras cada sentencia punzante de José se encierra un pensamiento digerido, una concepción de la vida, un constante grito de libertad. Aunque decir lo que se piensa a veces es incómodo porque como afirma José: “soy libertario, pero me he tenido que amoldar a la libertad que me  he buscao”. 

José, enhorabuena por triunfar de nuevo en Madrid, ¡cómo se ha quejao usted ahí arriba!

Muchas gracias, niño. Pero estoy un poco rozao de la voz, aunque me he quejao como si me dieran palos. Mira si llevo años en esto y todavía se pone uno más tenso que un espárrago en lo alto del agua. Pero tenía ya ganas de volver a Madrid porque tú sabes que echo de menos los rascacielos tan altos (bromea José). 

A pesar de que tienes un estilo muy personal con letras muy comprometidas, ¿qué cantaores te influyeron más en tu juventud?

Bueno, yo era un niño rural, estaba muy lejos de donde se cernía el cante, pero me vino la influencia de los cantaores por soleá como Juan Talega, Antonio Mairena, entre otros… Después está el aire de Jerez, he aprendío de mucha gente, de muchas voces diferentes. Luego yo le aplico la mía. Yo siempre he sío un enamorao de aquel que roza lo bien hecho, como cantaba por soleá Fernanda, por ejemplo. 

¿Qué opina del flamenco actual? 

Ahora también hay muy buenos cantaores, nunca se busca el mejor, porque el mejor en todos los palos es imposible. Unos por su tesitura de voz hacen mejor un determinado cante. Por ejemplo, esa dificultad que tiene la media granaína, aunque no es tan complicada cuando uno tiene una voz fina, que se adapta a la influencia que tenemos de Vallejo, pero el que tiene una voz más gruesa, más pastoso busca otros cantes. 

¿Se canta mejor cuando uno se queja de verdad, cuando uno canta con una disconformidad desde sus adentros?
En mi caso, yo le saco a mi cuerpo todos los rincones que tengo y por haber para añadirle ese sabor a ciertas cosas que se me ocurren escribir, esa consecuencia de que uno no es un cochino que no se pregunta pa qué tengo la cabeza. Cada cosa que digo está en consonancia con algo que yo no soy quién para pararlo, pero sí soy quién para analizarlo.

¿Cree usted que el mundo sigue oliendo mucho a mierda?
Desde mi punto de vista, siempre me voy por el camino más corto, aunque a veces el paisaje es muy horroroso como las guerras, la injusticia, la influencia que tenemos del que más corra. Nos denuncian porque la carretera marca una medida y nosotros queremos meter la distancia como los maestros de música, toda en un casillero. Queremos estar en Sevilla y en Madrid con la violencia que tiene un volante, y nos olvidamos de lo importante que es esta vida, hay que tener paciencia porque los higos se dan cada año. Siempre que el hombre se sale de lo que es lo normal, como por ejemplo, la guerra. ¡Qué coño hacemos nosotros en otros países!, ¿sembrar trigo? ¡No, señor, eso no es sembrar! Porque sembrar muertos (como dice mi malagueña), no es sembrar nada bueno. Cuando un pueblo es soberano y dice en la calle ¡guerra no!, ese pueblo deja de ser soberano, porque alguien se ha saltao esa soberanía sin hacer un referéndum. 


Algunas veces usted ha sido tildado de provocador, ¿se arrepiente por haber sido muy osado en alguna ocasión? ¿Cuál es la verdad de “El Cabrero”?
La memoria yo la tengo muy fresca y yo soy muy como tú me ves. Sé que la sociedad me enseña a lo que no quiero ser, no tengo por qué no estar duchao de prejuicios, ni colaboro con muchas cosas, ni me tengo que callar porque busquen a un culpable. Yo no me callo porque tenga que cumplir las órdenes, porque tarde o temprano las tendría que cumplir y hay órdenes para desobedecerlas. Y ése es mi lema, yo cuando acabo de cantar me vacío, pienso las horas que no estoy con la gente y me voy al campo y tengo una paz… miro lejos y siento la brevedad en el ser humano y presiento que uno es frágil, pero el hombre cuando quiere, cuando quiere…, quiere algo más que la medida de su sombra, pero por lo menos la conciencia le ronda en su mensaje. 

Siguiendo con el tema de la guerra, si tuviera la oportunidad de cantarle cara a cara un fandango a un político, ¿a quién preferiría, a Aznar o a Bush?
¡Tú has visto que los políticos escuchen? (responde con una mezcla de resignación e indignación). Los políticos en lo único que varían unos de otros es que por ejemplo, éste que está ahora le ha dado más apertura a alguien que no la tenía como son las mujeres. Los hombres ya somos demasiados machistas y a algunos les ha sentado muy mal esto. Yo siempre he dicho de cachondeo, que las mujeres y los gatos no son de nadie. Los perros tampoco, pero son más obedientes, más vasallos. Pero yo creo que los hombres tienen que pensar que las mujeres no son de nadie, además tenemos la ventaja que si la mujer no se lleva bien con ellos, pueden rehacer su vida y el hombre también. Y aquí no hay enemigos, lo único que hay que hacer es solucionar. Está bien que la mujer no dependa del pendón que le toque, y también a la inversa, sino que esa mujer dignamente trabaja y tiene su salario. Nosotros nos hemos creído que nos hemos quedado desamparaos, pero no, nadie tiene que matar a nadie, ni manipular sus días, sino que tenemos la libertad de poder escoger. A veces los hombres buscamos un rato de meditación y ya no somos tan fieros como nos pintan. 

¿A qué le canta El Cabrero?
Bueno, yo le canto a muchas cosas, como por ejemplo a un río, a las aguas que están claras y si a alguno no le gusta su cara las puede enturbiar, pero cuando pasa ése, a otro no se le ocurre enturbiar su cara porque se quiere reflejar en el agua. 

¿Cree usted que, como dijo Hobbes, "el hombre es lobo para el hombre"?
Bueno, el lobo se jarta de carne por el miedo que causa, pero porque se lleva tres días o cuatro y luego vomita. El hombre no mata a tres o cuatro de la manada, sino a miles y es capaz de echar a pelear a dos naciones para que se trituren. Y luego ¿para qué van a empezar a gobernar? Si ya no tienen a quién. Eso es como las cacerías grandes, una pila de muertos, grandes, chicos y tós. Se apuntan de socios ahí y a matar.

(José charla animado, se siente bien, pero Elena, su mujer y representante, entra al camerino para avisar con simpatía de que van a cerrar el recinto y hay que darse prisa para no dormir esa noche en los Jardines de Sabatini)

Bueno, José, en definitiva, ¿qué quiere expresar usted con su cante?

Yo estoy aquí para cantarme a mí mismo, porque por el suelo no se va de piedra en piedra como yo creía cuando la ignorancia todavía apenas no me dejaba respirar. Yo creo que hay que tener mucho cuidao donde uno pisa hoy en día porque hay mucha más mierda que piedra, pero bueno aquí estamos para sortearla. 

4 comentarios:

  1. Este hombre debería juntarse con algún "escribano" y publicar unas memorias, de ahí se sacaría jugo del bueno, qué grande
    Abrazo crack!!!

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  2. Pues es tremendo lo que tiene que contar este hombre. Un abrazo artista.

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  3. Muchas gracias, Juan. Por cierto, este sábado doy una charla en La Guardia sobre los cantes de labor de Sierra Mágina. Como sabes tu pueblo se incluye dentro de esta comarca así que si conoces a alguna persona mayor que hiciera estos cantes allí y me puedes pasar su contacto me sería muy útil. Un abrazo.

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